Toto contó la noche del jueves entre pedazos de pizza y copas de vino, una verdad irrefutable; que yo tiendo a sólo comprarme zapatos caros (bien caros) cuando tengo una inauguración importante. Y con eso... aumentó la fama de Diva que me persigue.
Sí pues. Los zapatos son mi fetiche, mi pata de conejo, mi amuleto de la suerte. No siempre puedo costearlo pero he tenido suerte. Como ese único par italino de Via Spiga marrones que Amaro y yo encontramos a super remate una tarde, y que resultaron ser de mi talla y costar más o menos 14 dolares.
De esas, pocas... pero las justas y necesarias. Bastante lejos de unos Manolo Blahnik... que no soy Carrie!.
Pero hay zapatos mitológicos. Como el día que inauguré "La Fiesta del Té". (En esa ocasión La Pollock pagó mis bajos instintos.) Terminé cediendo ante una par de botas stilettos, color rojo, Mazzari. Hasta el día de hoy sacan chispa del suelo cual si fuera marinera norteña. Las amo pero esa noche, luego de media hora, podía asesinarlas.
Claro... es que tiendo a conseguir los zapatos EL DIA MISMO de la inauguración. Que hasta en eso hay un ritual. La adrenalina, el feeling... el dolor. Es el único momento de mi vida en el que dejo que el glam le saque ventaja a mis Pumas color camello, que hacen que mis pies se sientan como tamalitos envueltos.
Así que volvamos a este jueves.
Patty sale de su casa, llega a Saga (que es semana de Remate total, vamos!), entra por la puerta, da 5 pasos y BLING-BLING!... amor a primera vista.
Patty se queda exstática (estática con matices de extasis).
Son unos zapatos de cuero color lila claro, con el interior de gamuza purpura de Kenneth Cole, Taco 9 de los 50's, punta redonda. Del color exacto al polo de PLACE que se iba a ponerrrrrr!!!
Sí pues. Los zapatos son mi fetiche, mi pata de conejo, mi amuleto de la suerte. No siempre puedo costearlo pero he tenido suerte. Como ese único par italino de Via Spiga marrones que Amaro y yo encontramos a super remate una tarde, y que resultaron ser de mi talla y costar más o menos 14 dolares.
De esas, pocas... pero las justas y necesarias. Bastante lejos de unos Manolo Blahnik... que no soy Carrie!.
Pero hay zapatos mitológicos. Como el día que inauguré "La Fiesta del Té". (En esa ocasión La Pollock pagó mis bajos instintos.) Terminé cediendo ante una par de botas stilettos, color rojo, Mazzari. Hasta el día de hoy sacan chispa del suelo cual si fuera marinera norteña. Las amo pero esa noche, luego de media hora, podía asesinarlas.
Claro... es que tiendo a conseguir los zapatos EL DIA MISMO de la inauguración. Que hasta en eso hay un ritual. La adrenalina, el feeling... el dolor. Es el único momento de mi vida en el que dejo que el glam le saque ventaja a mis Pumas color camello, que hacen que mis pies se sientan como tamalitos envueltos.
Así que volvamos a este jueves.
Patty sale de su casa, llega a Saga (que es semana de Remate total, vamos!), entra por la puerta, da 5 pasos y BLING-BLING!... amor a primera vista.
Patty se queda exstática (estática con matices de extasis).
Son unos zapatos de cuero color lila claro, con el interior de gamuza purpura de Kenneth Cole, Taco 9 de los 50's, punta redonda. Del color exacto al polo de PLACE que se iba a ponerrrrrr!!!
"... deben ser carísimos y totalmente prohibitivos. Deben ser incomodísimos. No debe haber mi talla...."
Que nada hijo!.... que eran un cielo, que había mi talla y..... estaban a 60% de milagroso descuento. Lo que me dejó sin palabras y con la tarjetilla de débito entre los dientes, ronrroneando y persiguiendo al vendedor de zapatos que menos se parecía a Al Bondy del mundo, que hasta guapo lo veía yo.
Así que todo bien. Centro Cultural España. Mucha gente, muy rico todo... y de pronto:
-"Pero niña!, tu sí que te has venido fenomenal con el saaaco-elpantalón-el Polo del color de los zapatos! que estas TSss!.... esta sí que se vino bien... hum!"- (o algo parecido)
Era el Guapo de El Maño (Aragonés de iniciales RR a quien ya mencioné antes, no figura por que dice a veces no querer figurar y que es figura legendaria... así que merece este A.K.A otorgado por Toni ) que me hechaba ojo desde el otro lado del salón y me estaba hechando también flores. Y es que, que El Maño te piropée ya es decir mucho!
Zapatos de la Buena Suerte. Ya lo creo. Casi zapatos de Dorothy. No sólo la charla y la muestra salieron geniales... también recibí un cumplido del guapo ibérico este con quien luego compartí risas con dulce tufillo a cerveza y quien me despierta un sorpresivo cariño, así rico-rico, como con años de maceración.
¿La noche? terminó en El Italiano, maravilla de restaurante escondido bajo la sombra del fantasma de la tienda Hogar, tomando un Concha y Toro, comiendo una "Pizza de Arquitecto" a la Puttanesca.... y su sabor no fue lo unico con actitud puttanesca esa noche.
¡Gracias a Dios por eso!, por que ahí estábamos Toto, Amaro, Toni, María Dolores (y olé), El Maño y yo. Hablando de Ibiza, el arte, la piratería, pantalones de plástico, groupies, punk, billeteras con aspiraciones ninjas y mucho más. ¿Que quien hablaba de qué?.... ahhhh.... bueno eso que importa ya... coño!
Lo que sé es que tengo una profesión de lo más güay que me permite usar mi arte de escusa para comprar zapatos y que luego me regala, noches de delicia como esa. Que sean más, y que la amistad cresca rociada de vino como en fiesta patronal!!! (que de Pisco no se puede, por que es destilado).
Así que todo bien. Centro Cultural España. Mucha gente, muy rico todo... y de pronto:
-"Pero niña!, tu sí que te has venido fenomenal con el saaaco-elpantalón-el Polo del color de los zapatos! que estas TSss!.... esta sí que se vino bien... hum!"- (o algo parecido)
Era el Guapo de El Maño (Aragonés de iniciales RR a quien ya mencioné antes, no figura por que dice a veces no querer figurar y que es figura legendaria... así que merece este A.K.A otorgado por Toni ) que me hechaba ojo desde el otro lado del salón y me estaba hechando también flores. Y es que, que El Maño te piropée ya es decir mucho!
Zapatos de la Buena Suerte. Ya lo creo. Casi zapatos de Dorothy. No sólo la charla y la muestra salieron geniales... también recibí un cumplido del guapo ibérico este con quien luego compartí risas con dulce tufillo a cerveza y quien me despierta un sorpresivo cariño, así rico-rico, como con años de maceración.
¿La noche? terminó en El Italiano, maravilla de restaurante escondido bajo la sombra del fantasma de la tienda Hogar, tomando un Concha y Toro, comiendo una "Pizza de Arquitecto" a la Puttanesca.... y su sabor no fue lo unico con actitud puttanesca esa noche.
¡Gracias a Dios por eso!, por que ahí estábamos Toto, Amaro, Toni, María Dolores (y olé), El Maño y yo. Hablando de Ibiza, el arte, la piratería, pantalones de plástico, groupies, punk, billeteras con aspiraciones ninjas y mucho más. ¿Que quien hablaba de qué?.... ahhhh.... bueno eso que importa ya... coño!
Lo que sé es que tengo una profesión de lo más güay que me permite usar mi arte de escusa para comprar zapatos y que luego me regala, noches de delicia como esa. Que sean más, y que la amistad cresca rociada de vino como en fiesta patronal!!! (que de Pisco no se puede, por que es destilado).
2 comentarios:
... pero faltó la fotito que grafique esa maravilla de sacoooooo, pantalón.... polo y ...de hecho los "zapatitos"
oh no!!!!!!!! acabolos de ver, exito total diva!!!!!!
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